Tú elegiste

Tú elegiste hacerlo así. Te quería por encima de todo. Fuiste la primera persona de la que me enamoré de verdad. Cada día que me dabas un abrazo con un beso de regalo era lo que cada día me hacia sonreír, sonreír de verdad. Pero todo lo que hiciste y dijiste fue un engaño. Me traicionaste de la manera más rastrera: haciendo que me enamorase de ti loca y perdidamente. Todos esos días, los días en los que yo pensaba que te importaba, aunque solo fuera un poco, tu actuabas. Cuando te sentabas a mi lado y me dabas la mano y hacías que mi pulso se disparara, me engañabas. Cuando me quitaste el móvil y fuiste a mis mensajes pareciendo que te importaba lo que tuviese, todo una farsa. Tus sonrisas regaladas, tus besos siempre en la misma mejilla, tus abrazos protectores.. Yo fui la tonta que hizo que todo eso se convirtiese en un cuento de hadas. Un cuento de hadas con final desastroso. Llegué a pensar que podíamos haber llegado a ser uno. Tú nos dividiste en caminos diferentes. Izquierda y derecha. Cada uno por su lado, para no volver a vernos. Te lo hubiera perdonado todo, todo el daño que me hiciste, las lágrimas derramadas, las noches en vela, tu pasotismo hacia mi varios días... Todo. Me enfadé contigo, te perdoné. Te enfadaste, ¿me perdonaste? Lo dudo. Lo dudo mucho. Mi primer amor, fuiste tu. Mi primer abrazo verdadero, el tuyo. Mi primer beso, fue tuyo. Ahora todo eso es mi pasado, pero lo que mas me duele, es que también es mi presente.

Soy loca, rayada, difícil de entender, no siempre contesto bien, despistada, terca, gritona, a veces intolerante, y muchísimas cosas más. Pero si no aceptas lo peor de mi carácter, seguramente no mereces lo mejor de mí. Pero por lo menos yo sé quién soy